Historia espiritual detrás de la foto 20 de EL CREDO EN IMÁGENES y el Domingo 21 del tiempo ordinario



El texto evangélico que se lee en todas la misas del domingo 24 de agosto es el correspondiente al Domingo 21 del Tiempo Ordinario. Parte del mismo dice: “En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?». Ellos contestaron: «Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas.» Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» Simón Pedro tomó la palabra y dijo: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.»” (Mt 16, 13-16).

Al repasar este texto me ha venido a la memoria la experiencia interior que viví en el Museo Aguilar y Eslava, en Cabra (Córdoba, España) durante la realización del trabajo del libro EL CREDO EN IMÁGENES y que desembocó en la foto 20 del mismo.


En la búsqueda de imágenes que reflejaran algunas de las verdades de fe que iban a componer el libro, di con la obra de un escultor que llamó poderosamente mi atención: Juan Manuel Miñarro. Este autor es catedrático de escultura en la Universidad de Sevilla y está considerado uno de los mejores imagineros en la actualidad. Me puse en contacto con él y me dijo que tenía varias obras en el museo antes señalado. Escribí a su director y pedí el permiso para poder realizar las fotografías. Todo fueron facilidades, cosa que agradezco desde estas líneas. El día señalado me presenté con mi sobrino Pablo Madrona como ayudante de fotografía. Mi sorpresa fue que tenía toda una sección dedicada a la Sábana Santa de Turín, y en ella Miñarro tenía varias esculturas. Sin embargo, una llamó poderosamente mi atención. Aunque la había visto en fotografías, nada tenían que ver con estar delante de ella. Era un retrato idealizado de Jesucristo realizado según los datos aportados por el lienzo de Turín. Pero lo que más me cautivó, y diría que inquietó, fue su mirada. Me inquietó, en la soledad, relativa oscuridad y tranquilidad del museo, porque percibía su mirada como interrogándome sobre la autenticidad de la vivencia de mi fe. Entonces me vino a la memoria la pregunta que este domingo hace Jesús a sus discípulos como si me la hiciera personalmente a mí mirándome a los ojos: «¿Quién dices tú, con tu corazón y con tu vida, que es el Hijo del hombre?».

Este momento traté de inmortalizarlo con una iluminación particular, cuyo resultado es la foto 20 de EL CREDO EN IMÁGENES.